15 de mayo de 2016

Si Esto Es Un Hombre – Primo Levi

Bordear la muerte a cada instante ofrece tal pureza en los ojos que la vida adquiere dimensiones inimaginables, matices desapercibidos alumbrados entre el miedo, la desesperación, la entereza y la aceptación. Una muestra de esta horrenda realidad tuvo lugar en los Lager, los campos de concentración que Alemania levantó dentro de sus dominios durante la II Guerra Mundial, en los que millones de inocentes fueron despojados brutalmente de su condición de hombre. Desde el campo de Monowitz, subalterno al de Auschwitz, el italiano Primo Levi relata sus espeluznantes experiencias desatando un entramado de reflexiones indispensables que conforman Si Esto Es Un Hombre. Una obra que debiera ser de cabecera no sólo para no olvidar errores del pasado, sino para evitar reproducir sus análogos en el presente y futuro.


A priori, la vida reservaba un hueco alejado de la literatura al turinés. A comienzos de la década de los cuarenta, con los ecos de la batalla resonando muy cerca, Primo Levi se licenciaba en química por la Universidad de Torino, uniéndose poco después a la resistencia antifascista italiana. Finalmente, es capturado por las milicias fascistas y, debido a su condición de judío, trasladado a Auschwitz. Después de burlar a la muerte en su penoso encierro, Levi decide plasmar sus experiencias en Si Esto Es Un Hombre, publicado con escaso y predecible éxito en 1947, que se reeditaría a raíz de la multitudinaria aceptación de la segunda parte, La Tregua, en 1963. Este sorprendente proceso es una constatación de cómo las cicatrices de la barbarie sólo se pudieron acariciar una vez que las mismas habían desaparecido, puesto que al terminar la guerra el público no tenía estómago para albergar más sufrimiento.

En su cincuentena, Levi abandonaría su oficio como químico para dedicarse a tiempo completo a su carrera de escritor y daría a luz obras de la talla de El Sistema Periódico (1975), Si Ahora No, ¿Cuándo? (1982) o Los Hundidos y Los Salvados (1986), tercera y última parte de la saga Auschwitz. En circunstancias que no se han llegado a aclarar y que suscitan acalorados debates entre propios y extraños, Primo Levi se quitaría la vida como consecuencia, supuestamente, de las heridas abiertas en su estancia en el Lager, aumentando el aura maldita del escritor.

Si Esto Es Un Hombre se divide en una serie de capítulos temáticos, ordenados cronológicamente, que versan sobre cada una de las facetas subyacentes a un prisionero de un campo de concentración: llegada, clasificación, alojamiento, alimentación, salubridad, trabajo, relación con los guardias y con otros presos, evolución psicológica… El enfoque del libro asombra por su cercanía, pues el objetivo no es hacer una retrospectiva global, sino el de dar la propia visión de la rutina en los campos de concentración. El tono empleado desborda por su humildad. De hecho, en ciertas fases el tono del italiano se vuelve dubitativo, vergonzoso, como si aún estuviera enclavado dentro de la alambrada; terrenal entre palabras superlativas, como una persona y no como un escritor. Estos factores imprimen a las páginas un realismo apabullante que atraviesa la piel, atrapa hasta dejar sin respiración y siembra impotencia y ternura a partes iguales.
Lo sabemos, mañana será como hoy: quizás llueva un poco más o un poco menos, o quizás en vez de a cavar vayamos al Carburo a descargar ladrillos. O mañana también puede acabarse la guerra, o nos matarán a todos nosotros, o seremos trasladados a otro campo, o se realizarán algunas de las grandes innovaciones que, desde que el Lager es Lager, son incansablemente pronosticadas como inminentes y seguras. Pero ¿quién podría pensar seriamente en mañana?”

Permanentemente, se cierne sobre el lector la sensación de estar en uno de los barracones. Las descripciones forman un entramado esencial en la obra con alto nivel de detalle, apoyado por una atmósfera intimista. Entre ellas se desarrollan profundas y lucidas reflexiones sobre la existencia humana, la vida y la muerte, en las que Levi regala pinceladas metafóricas de carácter barroco.
Porque así es la naturaleza humana, las penas y los dolores que se sufren simultáneamente no se suman por entero en nuestra sensibilidad, sino que se esconden, los menores detrás de los mayores, según una ley de perspectiva muy clara. Es algo providencial y que nos permite vivir en el campo. Y también es ésta la razón por la cual con tanta frecuencia, en la vida en libertad, se oye decir que el hombre es insaciable: mientras, más que de una incapacidad humana para el estado de bienestar absoluto, se trata de un conocimiento siempre insuficiente de la naturaleza compleja del estado de desgracia, por lo cual a causas que son múltiples y ordenadas jerárquicamente se les da un solo nombre, el de la causa mayor; hasta que ésta llegue a desaparecer, y entonces uno se asombra dolorosamente al ver que detrás de una hay otra; y en realidad, muchas otras”.

Conforme Si Esto Es Un Hombre avanza, se acepta con naturalidad la desposesión de la condición humana por parte de los presos, la inversión de los conceptos esenciales, la renuncia a cualquier otra moral o ética que no sea supervisada por el instinto más primario.
En cambio, para nosotros, el Lager no es un castigo; para nosotros no se prevé un término, y el Lager no es otra cosa que el género de existencia a nosotros asignado, sin límites de tiempo, en el seno del organismo social germánico”.
Quiero invitar ahora al lector a que reflexione sobre lo que podrían significar en el Lager nuestras palabras «bien» y «mal», «justo» e «injusto»; que juzgue, basándose en el cuadro que he pintado y los ejemplos más arriba expuestos, cuánto de nuestro mundo moral normal podría subsistir más allá de la alambrada de púas”.

Sin embargo, aunque la muerte aceche en cada esquina, aunque sean plenamente conscientes de por qué el cielo se tiña de columnas de humo blanco y denso, aunque las noticias del exterior sean difusas y contradictorias, los desposeídos no se resignan a morir y florece un espíritu de supervivencia del día a día que se torna feroz e implacable, clave para la subsistencia final. A diferencia de la entereza y la bondad de Levi, se sucede el éxito de los verdaderos desposeídos: los que no les han arrancado su condición, si no que han decidido claudicar de la misma para sobrevivir un minuto más.
Hay algo de verdad en las tres suposiciones. Elías ha sobrevivido a la destrucción de afuera porque es físicamente indestructible; ha resistido a la aniquilación interior porque es un demente. Es, pues, en primer lugar, un superviviente: es el más adaptado, el ejemplar humano más idóneo para este modo de vivir”.

Ciertas ediciones contemporáneas, incluyen un interesante epílogo, escrito en 1976, en el que Primo Levi contesta una serie de preguntas recurrentes que se repiten en la cabeza de los lectores. Con un tono reposado muy distinto al de la obra, más propio de la divulgación académica, el escritor italiano confiesa no tener rencor a sus captores, vigilantes y nazis en general que se arrepintieron de sus actos; motiva la falta de respuesta de los prisioneros; y lo más difícil, hace un ejercicio de empatía sin precedentes para tratar de entender el odio de los nazis hacia los judíos para trazar un brillante paralelismo con el presente. Ese, aunque implícito en el libro, debe ser el verdadero mensaje.

Hace meses, a modo de apunte personal, viajé a Auschwitz, antes de leer esta biografía. Los enclaves crudos, su ambiente tétrico y los encomiables esfuerzos de las instituciones polacas en tratar de informar con el máximo detalle de los hechos que allí tuvieron lugar no conforman ni una milésima parte  del dolor que trasmite la experiencia personal de Primo Levi. Si el dolor no se puede explicar mediante simples palabras, Si Esto Es Un Hombre se acerca bastante.



----------------------------------------------
Ficha Técnica:
Título: Si Esto Es Un Hombre.
Autor: Primo Levi.
Páginas: 224.
Editado por: El Aleph.
Año de publicación: 1947.
Comprar

2 comentarios:

  1. Hola, por como lo explicas estaría interesante leerlo, los tengo en mi kindle, pero todavía no me animo a leerlo, tal vez lo haga pronto. Gracias. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenas Omar,
      es una obra que merece mucho la pena, recomendada está.
      Gracias por pasarte por aquí.
      Saludos!

      Eliminar